CLICK HERE FOR BLOGGER TEMPLATES AND MYSPACE LAYOUTS »



wmode="transparent" align="middle" type="application/x-shockwave-flash" />

Seguidores






viernes, 13 de febrero de 2009

Seis cuerdas


La guitarra,

hace llorar a los sueños.


El sollozo de las almas

perdidas,

se escapa por su boca

redonda.


Y como la araña

teje una gran estrella

para cazar suspiros,

que flotan en su negro

aljibe de madera.

Campo santo


Cementerio silencioso
Con tus muertos tan callados
Pasa el viento tembloroso
Rugiendo por tus tejados,
Deja flotando en las fosas
Un estrepitoso llanto
Y se adormecen las rosas
Que adornan el camposanto.
Inscripciones se atormentan
Junto a los lirios morados
Noches oscuras inquietan
A los cipreses dorados.
Alerta están las esquinas
Y los muertos vigilados
Las afiladas espinas
Clavadas por todos lados.
A todos abres tus puertas,
Los abrazas con tus brazos
Noches y noches desiertas
Adoran tus negros lazos.
Allí vive la luciérnaga
Constantemente brillando
A todas las fosas llega
Con la muerte conversando.
Cementerio siempre en calma
Eres triste y silenciado,
Llevarás dentro del alma
Soledad siempre posando.
Trozos de tierra sagrada
Con suspiros hechos gajos
De acariciada mirada
De pozos y de altibajos.
Las estrellas están fijas
En tu corral sonrosado
Como si fueran las hijas
Del solar triste y cuadrado

jueves, 12 de febrero de 2009

Tu oscura condena


Hoy voy a desaparecer y nadie lo va a notar,
Se hará invisible mi piel y mi sangre se va a secar,
Mi alma va a volar, y se ocultara en tu habitación,
Cada noche te haré pagar poco a poco mi dolor.
Voy a cantarte al oído mientras toco tu cara,
Te haré sentir frío, hasta que quieras ir a la cama,
Cuando estés acostado recorreré tu cuerpo desnudo,
Haciéndole honor a tus deseos más oscuros.
Al escribir con sangre, mi nombre en tu pecho
Haré venir a tu mente siniestros recuerdos,
Los recuerdos serán míos, pero tú vas a sufrirlos,
Sonreiré al verte sufrir, pero no caerás al abismo.
Tendré algo de tiempo mientras lloras todo mi miedo,
Te voy a tocar inyectando lascivia en tu cuerpo
Y no podrás soportar ese placentero momento,
Debatiendo entre cielo, infierno y orgasmo perfecto.
Te arrepentirás de haber nacido y hacerme daño,
Suplicaras un momento de paz o al menos un pacto,
Ignorando, que tu castigo no tiene un final,
Estás condenado... cada noche de la eternidad.